Los fundamentos que no pueden faltar
Los expertos sostienen que el arte es una forma específica
de conocimiento, producción de sentido estéticamente
comunicable en un contexto cultural determinado, constituido
por diversos lenguajes simbólicos.
Si bien la función de la Educación artística
en el sistema educativo no consiste en la formación
de artistas; el conocimiento de las técnicas, los
recursos y elementos formales y su organización,
la posibilidad de expresarse, la voluntad comunicativa cobran
especial interés en tanto se orienten a la producción
de sentido y a la comprensión, más allá de lo literal, de los diferentes discursos propios del hombre.
El aprendizaje de los lenguajes artísticos, en todas
sus dimensiones, contribuye a alcanzar competencias complejas
que permiten desarrollar la capacidad de abstracción,
la construcción de un pensamiento crítico
y divergente, la apropiación de significados y valores
culturales, y la elaboración y comprensión
de mensajes significativos...
Por lo expuesto, sabemos que las disciplinas artísticas
tienen su lugar en la escuela y se encuentran al servicio
de la comunicación y del desarrollo de la creatividad.
El manejo y organización
que el niño hace de los recursos formales y la manera
en que se expresa y se comunica a través de ellos,
nos permite descubrir cómo -a partir del punto de vista
estético- construye él nuevos significados,
comprende y otorga sentido a la realidad en que está inmerso.
En primer lugar, es preciso aclarar que las disciplinas
que integran el área de educación artística
-el teatro, la expresión corporal/danza, la plástica
y la música- tienen contenidos, procedimientos y
técnicas propias que constituyen su objeto de enseñanza.
En este trabajo se tomarán las disciplinas artísticas
como recursos que comprometen y estimulan una serie de competencias
que pueden ser abordadas desde otras disciplinas. Es decir
que pueden ser utilizadas por el docente como estrategias
para plantear situaciones de enseñanza, para lo cual
será necesario tener en cuenta el nivel de desarrollo
cognitivo de los alumnos, los saberes previos, los esquemas
de conocimiento, lo que pueden hacer por sí solos
y lo que son capaces de hacer y aprender con ayuda.
Desde esta perspectiva, es posible ampliar y diversificar
la propuesta didáctica; enseñar: conceptos,
estrategias, valores; evaluar actitudes y conocimientos;
etcétera. Por otra parte, los alumnos podrán
aprender significativamente, consolidar e integrar conocimientos,
desarrollar la autoestima, la capacidad para trabajar en
equipo y para resolver situaciones nuevas.
A partir de la idea de que una propuesta pedagógica
que recupera diversos lenguajes artísticos no es
arbitraria, puesto que en la elección hay una intención
pedagógica, trataremos de pensar qué lugar
podemos darle en el salón de clase.
La Educación
artística, promueve en los alumnos el aprendizaje
de significados y de valores culturales, la consolidación
e integración de conocimientos, el desarrollo de
la autoestima y la capacidad para trabajar en equipo y para
resolver situaciones nuevas.
El aporte de las disciplinas artísticas
El área de Educación artística ofrece
contenidos que le son propios y que resulta interesante
tener en cuenta para su utilización en diversas situaciones
de enseñanza. Algunos de ellos son:
Teatro
La dramatización es un instrumento de comunicación
interpersonal, es un juego de ficción o juego de
simulación y, como tal, brinda la posibilidad de
probar diferentes roles y situaciones. Puede utilizarse
para la formación de conceptos y actitudes.
Resulta de gran aprovechamiento didáctico utilizar
en las improvisaciones dramáticas el material de
juego personal (bolitas, muñecas, osos de peluche,
etc.).
Actividades posibles |
Creación de personajes,
improvisación de situaciones reales o imaginarias,
conocidas o desconocidas, elaboración de situaciones
a partir de roles asignados, representación de
situaciones, etcétera. |