Los fundamentos que no pueden faltar
Los actos escolares forman parte de las tareas que se
desarrollan en la escuela. Se realizan de acuerdo con lo
dispuesto en el Calendario Escolar con respecto a la forma
y al contenido de la conmemoración en cada una de
las fechas.
En el diseño curricular se explica que el objetivo
de estas conmemoraciones es la contribución a
la formación espiritual, ética y cívica
de los educandos. Si ésta es la expectativa,
entonces tanto las actividades preparativas previas como
el producto "que se muestra" a la comunidad deberían
ser entendidos como verdaderas instancias de aprendizaje.
Sin embargo, no siempre se piensa y se vive la preparación
de los actos escolares desde esta perspectiva. Una posibilidad
de convertir mencionada actividad en un aprendizaje significativo
para los alumnos radica en hacer de ésta un "asunto"
de todos y no sólo del docente. La propuesta de trabajo
por proyectos resulta una buena estrategia metodológica
-aunque no la única- para encarar la tarea con este
criterio.
La organización
de un acto como parte de un proyecto apunta a promover actividades
de organización y puesta en práctica: reflexivas,
de análisis, de recolección de datos, de organización
de la información recabada, de realización
creativa, etc.
La planificación de un acto a partir de un proyecto
promoverá un aprendizaje significativo en la medida
en que se vincule a las necesidades o intereses de los alumnos;
que ofrezca la posibilidad de establecer conexiones entre
los contenidos de las diferentes áreas; que se ponga
de manifiesto su correlato con la vida cotidiana, etcétera.
Para organizar un acto por proyecto se pueden considerar
las etapas planteadas por algunos autores. Por ejemplo:
Evidentemente, si se decide encarar el acto como un proyecto,
es preferible que su preparación comience con la
debida antelación, porque así lo requieren
las actividades en las que se involucrarán los alumnos.
En efecto, para la realización del proyecto el docente
deberá:
-
Identificar el contenido que funcionará
como eje vertebrador (en este caso, la efeméride
correspondiente).
-
Analizar los contenidos curriculares trabajados
en otras áreas en un mes, un bimestre, un semestre
o en un ciclo escolar.
-
Definir junto con el grupo un producto
final que permita transmitir los valores, los datos
históricos y el mensaje que el grupo quiere comunicar.
-
Diseñar cuidadosamente actividades
que involucren contenidos de las diferentes áreas.
Es importante que las conexiones entre contenidos que
plantee el docente no resulten forzadas, deben supeditarse
siempre al producto final. Procurar además que
las tareas planificadas contemplen la participación
de todos los alumnos del curso. Se sugiere que las tareas
de indagación, sistematización y comunicación del proyecto sean sencillas, plausibles,
abiertas y flexibles. Sugerir a los alumnos que aporten
otras propuestas de actividades en función del
producto final.
-
Ordenar las actividades en una guía
detallada, para que la descripción y las etapas
del trabajo sean comprendidas y fácilmente identificadas
por los alumnos ya que en varias ocasiones tendrán
que trabajar de manera autónoma y autogestionaria.
Es importante no olvidar que aun en las propuestas abiertas,
flexibles y de reconstrucción permanente como pueden
ser los proyectos, es el docente quien conduce este proceso
de aprendizaje y sabe con certeza hacia dónde van
dirigidas sus acciones.
Las ideas que construimos sobre el tema
"¡Uy! Tengo que preparar el acto con 4º
y no sé qué puedo hacer"
"De la ornamentación y las carteleras se ocupa
la docente de plástica".
"Los chicos ya están cansados de ensayar pero
lamentablemente tienen que hacerlo".
"Justo ahora me cae el acto y tengo que hacer un corte,
¡es una pérdida de tiempo!"
"No tienen ganas de hacer nada, no les interesa".
Éstas son algunas de las frases que
solemos decir o escuchar en la escuela. Existe una fuerte
tradición escolar respecto de los actos y conmemoraciones:
-
Preparar el acto implica una pérdida
de tiempo.
-
El maestro prepara el acto, el grupo
lo reproduce.
-
El acto escolar debe ser una representación
o teatralización.
Suelen aparecen las ideas o imágenes
recurrentes que se plasman en las actuaciones, como el túnel
del tiempo o las escenas con damas y caballeros, negras,
pastelitos, vendedores ambulantes, etcétera.
La reiteración de estos tópico
se explica dada su pertinencia al tema y al nivel de los
alumnos. También es cierto que algunos recursos como
el túnel del tiempo tienen como concepto trabajar
nociones temporales fundamentales para el aprendizaje de
la historia. Sin embargo, no son los únicos recursos
posibles.
Estos ejemplos han sido mencionados con el
fin de caricaturizar lo que hacemos en la escuela, como
la repetición de lo que tradicionalmente "se
debe hacer" en estos casos.
Algunas puntas para trabajar
en el aula
Si los actos escolares tienen como objetivo
la formación, entonces significa que son instancias
de aprendizaje para los alumnos y como tales tendremos que
encararlos.